Papel y cartón en el empaque 

Los empaques realizados con papel y cartón son los mejores para el medio ambiente porque son parte de la naturaleza. Sin embargo, requieren de otro material pues no son permeables. Existen distintas formas de cajas y éstas se eligen según las necesidades del producto.

El papel es un material que tiene una ventaja medioambiental al provenir de pinos y abetos que además crecen rápidamente en el norte de Europa y América. Los empaques de papel son biodegradables al ser un material natural que se descomponen sin contaminar la tierra, ni el agua. Y es apto para ser reciclado hasta que las fibras de celulosa disminuyen debido al procesamiento.

Debido a que el papel no es una barrera, hay que agregarle diversos acabados. Se puede poner desde cera hasta plásticos y aluminio para proteger al producto de la humedad o de gases.

Para el packaging el papel que se elige regularmente oscila entre el cartón de fibra ondulado al liso.

El cartón ondulado suele usarse más como embalaje para transporte ya que es muy útil para proteger a un producto durante los traslados. El cartón sólido que regularmente se hace caja plegadiza se usa para producir embalajes de bienes de consumo de alta rotación con distintos estilos por las constantes variaciones y modificaciones.

Dentro del proceso de packaging es importante considerar el almacenaje ya que aún vacías las cajas ocupan un lugar.

Las cajas rígidas no se pueden llenar de forma automática por lo que regularmente se utilizan para guardar producción limitada de objetos de valor.

En las producciones masivas se deben recibir los empaques en plano de tal forma que se puedan armar y llenar en automático como parte del proceso de producción. Existen algunos paquetes que se conocen como envolventes que dejan espacios vacíos alrededor del producto en la misma cadena de producción.